Machan International Co., con sede en Taiwán, fabrica productos de chapa metálica, carros médicos y de almacenamiento de herramientas, y gabinetes inteligentes de almacenamiento de energía. El año pasado, recurrieron a Lean para mejorar su proceso de desarrollo de productos.
En 2021, nos encontramos ante una realidad desalentadora: a pesar de las elevadas ventas, nuestros márgenes eran muy bajos. Teníamos demasiados pedidos OEM y pocos pedidos ODM, lo que nos dejaba con bajos ingresos y un futuro incierto. La pandemia obstaculizó aún más nuestra capacidad de llegar a los clientes y nuestra innovación parecía estancarse. Nuestra excesiva dependencia de un único cliente importante en los EE.UU., que representaba el 30% de nuestras ventas, planteaba un riesgo importante. Si los perdiéramos, nuestro negocio sufriría inmensamente. Estaba claro que necesitábamos un nuevo enfoque. Entonces, tomamos una decisión estratégica: necesitábamos pasar de OEM a ODM y diversificar nuestra base de clientes.
Comenzamos con una comprensión simple pero profunda: necesitábamos comprender mejor a nuestros clientes. ¿Pero cómo hacer eso? En nuestra búsqueda de una solución, conocimos al profesor Yu-Hsiu Hung, un experto en desarrollo de procesos y productos lean (LPPD) de la Universidad Nacional Cheng Kung aquí en Taiwán. Sus enseñanzas fueron una revelación. Aprendimos a comenzar comprendiendo las necesidades del cliente antes de desarrollar productos. Este cambio de enfoque fue transformador. Anteriormente, por cada diez ideas de productos que ofrecíamos a nuestros clientes, solo tres ganaban terreno. Con LPPD aprendimos a centrarnos en lo que realmente necesita el mercado.
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